Profecías de la gran Pirámide III
Interior de la Gran Pirámide
Según Barbarín: El sistema de pasadizos está organizado de acuerdo con un plano geométrico y simbólico en el que no se dejó nada al azar.
Si uno se interna por la galería de la antecámara se ve que el techo se eleva bruscamente a una altura de 8,60 metros, mientras que su anchura apenas mide más de un metro. Pero en realidad, dos rampas horadadas por orificios regulares, revestidos por ambas partes, se ensanchan. Su longitud a ras de suelo es de 47,85 metros.
La rampa de la Gran Pirámide llega al Gran Grado. Después tras atravesar dos pasadizos bajos, separados por la Antecámara, se llega a la Cámara del Rey, así llamada, aunque nada justifica esta denominación.
Según el Libro de los Muertos, la designación de esta estancia es puramente simbólica y poética. Se llamaba la Cámara del Misterio y de la Tumba Abierta, la Cámara del Gran Oriente, la Presencia Literal del Maestro de la Muerte y el Sepulcro
Es una vasta habitación de 10,46 metros de longitud y 5,23 metros de ancho, por 5,58 de altura.
Esta cámara completamente vacía, aparte de contener, y no en el centro, sino casi en un rincón, y orientado de través, una especie de arca o cofre que a primera vista semeja un sarcófago. Es de granito rojo perfectamente pulido, y tallado en ángulos rectos, sin tapadera. Es, escribió el abate Moreux, sonoro como una campana.
Demasiado importante y excesivamente pesado para haber sido transportado a la Gran Pirámide tras ser construida ésta, sólo pudieron colocarla en la Cámara del Rey cuando se construyó ésta.
Por algún tiempo se creyó que dicho cofre había servido de ataúd de un Faraón, o al menos que era su primer destino, pero tal opinión no ha resistido otras más científicas y autorizadas.
Sus medidas interiores son las siguientes:
1,97 metros de longitud.
0,68 de anchura.
0,85 de profundidad.
Es decir, un volumen interior sensiblemente igual a 69.000 pulgadas cúbicas piramidales.
Su volumen externo es exactamente el doble de su capacidad interior, lo cual es ciertamente intencionado.
Lo más curioso es que su capacidad cúbica es la misma que la del Arca de la Alianza construida por Moisés (quien, sin duda alguna, poseía secretos de los sacerdotes egipcios).
La capacidad de ambas arcas es de 1.138,66 litros.
Respecto al Mar de Bronce, vaso célebre construido por Iram para el Templo de Salomón, y cuyas medidas se hallan en el Libro de los Reyes, su capacidad cúbica sería de 3.562,07 pulgadas piramidales. Y, según el abate Moreux, esta número dividido por 50 es, con la diferencia de una septimilésima, la capacidad del Arca de la Alianza y del Cofre de la gran pirámide.
Barbarie, según dicho abate Moreux, escribió que al Cofre se le asignó un papel precioso de medición. Sin embargo¿Cuál, exactamente?.